El trabajo inteligente va mucho más allá que el concepto de teletrabajo, ya que también supone nuevas dinámicas.
El trabajo inteligente o Smart Working no significa necesariamente trabajo remoto. En realidad, se trata de algo así como una actualización de esta solución laboral. Pero lo que es más importante aún, implica e implicará un gran cambio para las empresas, las personas, las ciudades y los espacios urbanos. Su reciente crecimiento nos empuja a comenzar a ser conscientes de ello, si queremos sacarle el máximo partido de cara al futuro.
En Fed IT, como expertos en selección de personal y headhunting en el sector IT, y por eso analizamos hoy esta nueva tendencia en la forma de trabajar.
¿En qué consiste el Smart Working?
Smart Working significa poder trabajar no solo desde casa, sino también en otros entornos como espacios de coworking, cafeterías, aeropuertos, salas de espera, etc. Esto se traduce, aparte de en beneficios productivos y laborales, en un impacto positivo en la movilidad urbana y la contaminación, evitando desplazamientos obligados a un sitio concreto.
Es una nueva filosofía de gestión laboral basada en dar a los trabajadores flexibilidad y autonomía en la elección de espacios, tiempos y herramientas para realizar su labor. Sin embargo, esto también significa una mayor responsabilidad a la hora de hablar de resultados y cumplimiento de objetivos. Si la empresa puede ofrecer a sus empleados más libertad para administrar sus días laborales, los empleados deben asumir la responsabilidad de las decisiones que afectan su correcto desempeño laboral.
Las tecnológicas, pioneras
En realidad, no existe una ciencia exacta para poner en práctica el trabajo inteligente, sino que cada empresa está explorando la fórmula a su manera.
Y es que, como ya mencionamos, cuando se habla de Smart Working, se habla de un concepto radicalmente diferente de entender el trabajo a como se lleva haciendo en el último siglo. Es una práctica que se está extendiendo cada vez más en startups y grandes empresas tecnológicas, pioneras en implantarlo, como Google o Twitter.
En cuanto a los empleados respecta, se trata de garantizar que sean dueños de su propio tiempo y libres de elegir sus herramientas de trabajo en función del contexto. Este ambiente, más flexible en cuanto a metodología laboral, crea eficiencia y libertad para que cada trabajador desempeñe sus funciones y realice sus tareas de la manera que considere óptima para obtener los mejores resultados.
Beneficios para el empleado
A continuación, anotamos una serie de beneficios que se derivan de la adopción del Smart Working:
- Organizar horarios personalizados y flexibles.
- Encontrar tiempo para el descanso.
- Construir un espacio de trabajo cómodo.
- Disponer de tiempo personal.
Espacios inteligentes
Permitir que las personas trabajen de acuerdo con las metodologías mencionadas anteriormente también significa que la empresa tiene la responsabilidad de brindar a sus empleados los espacios adecuados. Incluso los espacios tradicionales deben rediseñarse para promover la flexibilidad y la comunicación entre las personas, creando un buen ambiente de trabajo.
Por ejemplo, las terrazas o los grandes ventanales proporcionan iluminación natural, lo que tiene un gran impacto en nuestra salud y concentración. Además, los sofás pueden marcar la diferencia, generando comodidad e incluso las plantas pueden hacer que la oficina se sienta más agradable.
También son útiles los espacios de coworking, donde se prima la colaboración, la comunidad, la sostenibilidad, la accesibilidad y la flexibilidad. Estos lugares son más que un espacio físico, son una colección de diferentes formas de interacción social y colaboración, lo que facilita la innovación y la construcción de comunidad dentro del sector IT. Además, ofrecen grandes oportunidades para asistir a eventos de networking, talleres o programas de apoyo.
A pesar de que vivimos tiempos inciertos, el Smart Working es una oportunidad para repensar, restablecer y reinventar las empresas tecnológicas a nivel empresarial e individual. El trabajo remoto es una nueva realidad y, si se hace bien, esto empujará a las empresas a ser más productivas, competitivas y conscientes. Además, el trabajo en remoto también abre la puerta a un grupo de talentos disponibles que no comparten un espacio geográfico.